Cómo Reiniciar la Pasión en tu Matrimonio
Nota de Sharon: sé que
los devocionales sobre el matrimonio son difíciles para muchas que no están
casadas y tal vez les gustaría estarlo. Es por eso que generalmente mantenemos
las devocionales matrimoniales que ministran a miles de mujeres en el mes de
febrero. Ya sea que estés casada o seas soltera, por favor acompáñanos a las GiG
en oración por los matrimonios alrededor del mundo.
La Verdad de Hoy
“Sin embargo,
tengo en tu contra que has abandonado tu primer amor. ¡Recuerda de dónde has caído! Arrepiéntete y
vuelve a practicar las obras que hacías al principio. Si no te arrepientes, iré
y quitaré de su lugar tu candelabro.” Apocalipsis 2: 4-5 (NIV)
Entre Amigas
¿Qué haces cuando has perdido ese sentimiento de amor
en tu matrimonio? Tal vez realmente adoraste a tu esposo al principio, pero
ahora no puedes recordar por qué. Tal vez honestamente admiraste sus mejores cualidades,
pero ahora no puedes recordar cuáles eran. Tal vez apreciaste sus maravillosos
atributos, pero ahora los das por sentado.
Entre sacar la basura, pagar las cuentas, correr al
transporte colectivo, cortar el césped, disciplinar a los niños y doblar la
ropa, a veces se pierde la pasión del matrimonio. Nos pasa a todos en un
momento u otro. Podemos estar tan ocupados cuidando
la vida que nos olvidamos de cuidar el amor.
Ninguno de nosotros se casó para poder tener una
larga lista de quehaceres. Si eres como yo, lo más probable es que te hayas
casado porque estabas locamente enamorada ¡y no podías imaginar la vida sin tu
hombre! Te casaste porque tu corazón se saltaba un latido cada vez que lo
mirabas. No podías esperar para casarse y construir una vida con esta increíble
persona que Dios había traído milagrosamente a tu vida. Tal vez todavía te
sientes así. Pero tal vez podría usar un pequeño recordatorio ─un reavivamiento
del romance.
En el libro de Apocalipsis en la Biblia, Dios dijo
esto a la iglesia en Éfeso: Sin embargo, tengo en tu contra que has abandonado
tu primer amor.” (Apocalipsis
2: 4). Éfeso era una de las iglesias más amorosas del Nuevo Testamento y, sin
embargo, en algún lugar del camino perdieron la emoción inicial de conocer a
Cristo. Su amor mutuo y su amor por Dios se había enfriado.
Entonces, ¿cómo recuperar ese sentimiento de amor?
Dios le dio a la iglesia dos pasos simples, y creo que podemos aplicarlos a
nuestros matrimonios también. “Recuerda de dónde has caído! Arrepiéntete y
vuelve a practicar las obras que hacías al principio.” (Apocalipsis
2: 5, énfasis agregado).
Recuerda cómo fue al principio.
Vuelve y haz las cosas que hiciste al principio.
Para la mayoría de nosotros, la vida es tan cotidiana.
Sin embargo, la acumulación de pequeñas luchas puede brocar como las termitas
para socavar los cimientos de lo que parece ser una estructura saludable con la
misma seguridad que el inesperado estruendo de un desastre repentino. Y la
rutina, incluso una buena rutina, puede robarnos la alegría y la pasión del
matrimonio ... si se lo permitimos.
Un día tomé muy en serio las palabras de Juan en Apocalipsis,
y decidí recordar y volver a cortejar a mi esposo durante catorce días
seguidos. Diariamente no fue un romance que sacudiera la tierra, aunque había algo de eso. Un día simplemente
coloqué una nota adhesiva en el espejo de su baño que decía: "Te
amo". Otro día coloqué una caja de caramelos Red Hot en el asiento de su
auto con una nota que decía: "Eres un bombón". Uno Por la mañana
calenté su toalla en la secadora y la tenía lista cuando salió de la ducha.
¿Y sabes lo que pasó? Al final de los catorce días,
Steve tenía un salto en su caminar y una sonrisa en su rostro como el gato de
Cheshire[1]. ¿Y qué paso en mí? Apenas puedo describir
el amor que brotó en mí, mientras amaba a mi hombre bien. Escucha esto ... cambié.
No tengo una gran y mala historia personal de cómo
Dios tomó un matrimonio terrible y tumultuoso y lo transformó milagrosamente en
un libro de cuentos lleno de rescates de caballeros blancos, romance implacable
y cabalgatas hacia la puesta del sol, dejando atrás todo peligro y oscuridad.
Aunque nuestro matrimonio ha sido todo eso en un momento u otro, no es un
cuento de hadas.
Nuestro matrimonio es un libro diario, una página
tras otra, un día tras otro. Estoy haciendo conjeturas al igual que el tuyo.
Algunas entradas están manchadas de lágrimas; otras tienen las esquinas
dobladas como las favoritas. Algunos días se ven empañados por infructuosas enmendaduras
que no pudieron borrar del todo las palabras hirientes dichas; otros tienen los
dedos desgastados de leer preciosos eventos una y otra vez.
Pero en esos días en que veo que mi matrimonio
vuelve a caer en la cadencia mundana de la rutina sin pasión, saco mi lista de
ideas y pongo una sonrisa en la cara de Steve.
Y ese es mi reto para ti y para mí hoy. Cuando
veamos que el fuego necesita ser avivado, recuerda y vuelve.
Vamos a Orar
Señor, debo admitir que a veces pongo mi matrimonio
en segundo plano. Ayúdame a recordar y a volver. A recordar la pasión y el amor
que tenía por mi esposo en los primeros años. Ayúdame a mostrarle cuánto lo amo
hoy y todos los días... incluso en los días que realmente no me guste.
En el nombre de Jesús,
Amén.
Ahora es tu turno
Reflexiona en este versículo 1 Corintios 7:5 NIV “No se
nieguen el uno al otro, a no ser de común acuerdo, y solo por un tiempo, para
dedicarse a la oración. No tarden en volver a unirse nuevamente; de lo
contrario, pueden caer en tentación de Satanás, por falta de dominio propio.”
¿Cómo ayuda una esposa a proteger a
su esposo de los ataques del diablo al mantener la pasión como una prioridad en
el matrimonio?
Más de las GiGs
¿Tu matrimonio necesita un poco de
ayuda en el campo del romance? ¿Ha crecido el rumor de la rutina diaria? Si es
así, el libro de Sharon, A 14-Day Romance Challenge , El Reto de 14 Dias de Romance, es justo el libro
de ayuda. Con casi 250 maneras para enamorar a tu esposo, vas a estar capacitada
para sorprender a tu hombre con simples hechos de afecto que él va a atesorar
por toda una vida. (¡Es un regalo genial para un shower de bodas!) También,
revisa en tu teléfono la App ─Praying Wives ─tanto para dispositivos Apple como
Android.
Traducción: Norma Galvis
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